El mundo digital ha revolucionado el mundo actual en el que vivimos y con ello la forma en la que las marcas gestionan su comunicación, marketing y también ventas de productos. Cada vez existen más plataformas online para comprar por internet, servicios con los que recibir tu pedido en menos de 24 horas y facilidades para poder realizar la entrega en el lugar del mundo que uno desee.
En este contexto, este mercado puede haber encontrado una nueva oportunidad en la que desarrollar su potencial para aumentar sus ventas, sobre todo unido de manera directa al enorme poder que tienen las redes sociales hoy en día. En noviembre de 2016, Instagram lanzó una opción en la que las empresas pueden etiquetar productos en sus publicaciones para poder acceder a ellos desde la propia red social e incluso comprarlos directamente.
El funcionamiento es sencillo. Dado que Instagram es propiedad de Facebook, para poder etiquetar un producto es necesario subir la información en Facebook en el apartado ‘Tienda’ de tu página de empresa, añadir una foto, nombre y descripción del producto y una foto del mismo. Después se sincronizará automáticamente con Instagram para poder etiquetar ese producto en la próxima publicación.
Cuando se ha realizado esta acción, el usuario puede ver que hay uno o más productos etiquetados gracias a un pequeño símbolo de una bolsa de la compra en la esquina superior derecha del post. Pulsando sobre la imagen, el usuario interesado puede ver la etiqueta del producto, hacer click en ella y ver primero una página inicial del producto y después acceder a la página web donde esté a la venta para poder realizar la compra.
El producto no se puede comprar directamente en Instagram, pero sí sirve como canal para dirigir tráfico a una web, sección o ficha de producto en concreto para que la gente pueda adquirirlo, más aún teniendo en cuenta que los usuarios cada vez usan más el móvil para navegar por internet y que Instagram es una red social cada vez más usada entre el público joven.
En este sentido, las empresas especializadas en el mundo del deporte, clubes, equipos, ligas y jugadores tienen una oportunidad interesante por delante para probar esta funcionalidad y ver el retorno que les genera tanto en impacto en redes sociales como en ventas online.
Uno de los últimos ejemplos más claros que muestran que la industria del deporte está apostando por generar ventas en Instagram es la reciente acción realizada por la tenista estadounidense Serena Williams. A finales de noviembre, la jugadora puso a la venta una chaqueta de su marca personal ‘S by Serena’ que únicamente podía ser comprada a través de la nueva función Instagram ‘Checkout’, lanzada durante 2019, la cual sí que permite comprar un producto sin necesidad de salir de la app.
Los datos una semana después de poner a la venta la chaqueta, en la que también promocionaron el lanzamiento de un nuevo modelo de mono de vestir que se podía comprar tanto en Instagram como en la propia web de la jugadora, mostraron que el 50% de las ventas de la web procedieron desde la app de Instagram según la responsable de comercio electrónico de SerenaWilliams.com en unos datos recogidos en The Wall Street Journal.
Instagram de este modo se puede posicionar para que las marcas deportivas se tomen en serio las acciones de comercio electrónico que pueden realizar en esta red social, más aún teniendo en cuenta que los usuarios cada vez usan más el móvil para realizar compras. Según datos de Adobe Analytics, el 35,6% de las ventas online se realizaron desde smartphones entre el 1 de noviembre y el 2 de diciembre, lo que supone un 28,8% más que en el mismo periodo de 2018. Además, en el mismo periodo más del 58% de las visitas a webs de retails fueron realizadas desde teléfonos inteligentes.
Algunas ligas como la NBA ya usan esta funcionalidad desde hace algún tiempo, donde se puede adquirir merchandising o camisetas de la competición a través de Instagram. Clubes de fútbol españoles como el Real Madrid también ponen a disposición de sus seguidores etiquetas de producto para poder comprar las camisetas del equipo online a través de esta red social. Otros equipos como el Paris Saint-Germain o el Bayern de Múnich también han habilitado esta opción para sus miles de seguidores en esta red social.
En este sentido, y de cara al futuro de este negocio, el responsable de Deportes de Instagram Dev Sethi afirma que “las compras online como funcionalidad es una de las principales prioridades para los deportes en Instagram”.
Una de las partes positivas de poder derivar tráfico a ventas desde Instagram es que las marcas pueden controlar y monitorizar esta actividad gracias a las estadísticas que ofrece esta red social. Con ellas pueden ver el número de clicks, las impresiones y el impacto generado y la cantidad de usuarios que han llegado a la pasarela de pago a través de Instagram. Aún así, esta es una opción que las marcas deben explorar para trazar su estrategia, ya que no deben centrar a partir de ahora toda en redes sociales sino que pueden ir probando poco a poco cómo funcionan las ventas por esta vía y no apostar todo a una única estrategia, como comenta Dev Sethi.
