Cualquier momento, hora y lugar para llevar a cabo la formalización de un contrato, esa es la finalidad de la digitalización de los procesos para llevar a cabo una contratación. Tanto empresa como cliente salen beneficiados de esta innovación tecnológica y legal, porque el cliente puede ahora contratar los servicios de las empresas sin tener que moverse de casa y por parte de las empresas sus posibilidades para llegar a un número más elevado de potenciales clientes proporcionarán mayores beneficios. Por otra parte, las empresas deben tener muy presente la aplicación de la nueva regulación europea que contempla nuevos requisitos legales para la gestión de datos personales en entornos digitales, la RGDP, para desarrollar sistemas de contratación digital.
Source: Madison