Aunque sabemos que la organización de un evento no se puede dejar para última hora, puede que todavía haya alguna compañía rezagada por cerrar detalles en su evento de Navidad. Si este año formas parte de la organización de la cena de tu empresa y estás en esta situación, no te preocupes. Lee atentamente, coge las ideas que más te gusten y trabaja duro ¡Todavía estas a tiempo!
A pesar de lo que podamos pensar, organizar un evento corporativo en Navidad no es algo fácil para las empresas. Hay que tener en cuenta que es una cita que se repite año tras año y a la que, normalmente, acuden las mismas personas: tus empleados. Aunque el evento que organizaste las Navidades pasadas saliese bien, no cometas el error de hacer lo mismo. En la organización de eventos, el “si algo sale bien, repítelo”, no siempre vale.
Como organizador de eventos uno de tus objetivos principales debe ser sorprender a los asistentes. Es ahí donde está la dificultad para las compañías, puesto que muchos de sus empleados llevan años brindando con ellos en la cena de Navidad. Así que tienes todo un reto por delante.
Eventos temáticos
El primer paso para conseguir la originalidad que deje con la boca abierta a todos los asistentes es buscar una temática, un hilo conductor que haga que cada detalle tenga su sentido. Además de dar armonía al evento, también te será muy útil durante la organización de éste. Es una manera de acotar acciones y que no dejará que te vayas por los cerros de Úbeda cuando estés realmente metido en la planificación.
En la elección de la temática puedes escoger algún hito importante que haya vivido la empresa ese año, o alguno más recurrente como pueden ser las políticas de responsabilidad social como el cambio climático. Ahora presentar los platos en menaje reciclable no es sinónimo de austeridad sino de compañía preocupada por el medioambiente.
El empleado es lo primero
Otra de las claves que debes tener siempre presente es que el evento de Navidad es para los empleados, es una forma de terminar el año junto a las personas con quienes compartes trabajo. Con esto te queremos decir que busques su comodidad, recuerda que el empleado es tu mejor publicidad. Aunque la cena de empresa la englobamos dentro de los eventos corporativos de una compañía, no es el momento de hacer team building o buscar que los trabajadores se conozcan mejor, en ello ya deberíamos de haber trabajado durante todo el año con otro tipo de encuentros o eventos, como ya hablamos durante el mes pasado en este mismo blog. Ahora es momento de disfrutar y de dejar que tu equipo se siente, cene, hable y baile con quienes deseen. Porque aunque no seas consciente, muchos de los trabajadores dejan de ser compañeros para ser amigos.
Con estos dos aspectos claros deja volar la imaginación y lleva a la cena de Navidad un resumen de lo que ha sido el año de la compañía. Es decir, haz que lo personal esté muy presente durante el evento. Por ejemplo, si quieres reproducir un video con momentos que recojan el año de los empleados, déjalo en sus manos, nadie mejor que ellos va a saber cuáles han sido los instantes que quieren recordar con sus compañeros. Además, de esta forma, también estarás involucrándolos en la organización de la cena navideña.
Por último, no te olvides algo muy importante; la comida y la bebida no deben ser un plato secundario en la organización del evento. Todos recordamos una celebración en la que alguno de estos dos puntos ha flojeado y no te ha dejado un buen sabor de boca. Una buena idea es crear platos temáticos que vayan en sintonía con el hilo conductor que hayas elegido. Seguro que surgen ideas muy originales.
Por lo que si la organización de la cena de empresa este año se te ha echado encima, no te preocupes, todavía estás a tiempo de disfrutar de un buen evento junto a tus compañeros. Solo tienes que recordar: busca un tema diferente al de otros años, deja que la gente se disfrute y no escatimes ni en comida ni en bebida ¡Ánimo!